La habitación ofrece buen espacio para una estancia cómoda, ideal para familias. La limpieza es adecuada y la disposición de los servicios de wellness destacan en las zonas comunes.

El desayuno deja mucho que desear. el pan envasado y el embutido limitado no se alinean con lo que uno esperaría por el precio. También, el lugar para sentarse en el comedor es incómodo. las mesas enfrentan pasillos y la cocina, lo que resulta poco privado. Además, notamos que la barrera para bebés estaba demasiado alta, lo que la hacía ineficaz. En general, tuvieron problemas de gestión al asignar mesas, ya que algunas estaban vacías mientras otros huéspedes eran reubicados de manera cuestionable.

Ver los elefantes desde la habitación es increíble.

nunca pensé que un hotel podría ser tan poco acogedor. nos pusieron en una mesa pegada a la cocina y cada vez que pasaba alguien era incómodo, sin mencionar el desayuno que sabía a plástico. esperaba que me trataran mejor, quizás una habitación mejor por las molestias, pero parece que no lo consideran un detalle importante aquí. que decepcion.

Espectacular lugar para disfrutar del amanecer observando animales.

Habitaciones amplias, y despertar con vista a los elefantes es simplemente asombroso. El personal fue increíblemente atento, ¡no puedo quejarme de nada!

Solo un pequeño detalle, no hay parking privado, así que a aparcar en la calle, ¡toda una aventura!

Las vistas desde el balcón son una locura y ver elefantes es inolvidable. Me encantó el jacuzzi de la habitación, ideal para relajarme.

El servicio es muy atento y la limpieza impecable. La habitación tiene buen espacio, ideal para unas noches familiares. Las zonas comunes son acogedoras y bien mantenidas. Me encantó la cercanía al parque. Regresaría sin dudarlo. 🙂

La vista desde el balcón me dejaba sin aliento, como si estuviera en un cuadro de un pintor famoso, solo que aquí podía ver elefantes de verdad paseando. Y el jacuzzi de la habitación era tan relajante, que sentí que estaba en un spa cinco estrellas en vez de un hotel.

Falta de aparcamiento

excelente acceso a rutas y parque natural cercano

mi estancia fue memorable, ya que el hotel está a solo 2 kilómetros de Cabarceno, donde disfruté de un recorrido maravilloso por el parque, además, el Restaurante Casa Venero está a menos de 5 minutos a pie y ofrece deliciosos platos locales que complementaron mis paseos por la ciudad.

despertar con vistas a los elefantes

habitación amplia, desayuno variado

falta de parking privado

la habitación era un poco pequeña pero la amabilidad del personal y el desayuno variado fueron geniales. además, la vista del amanecer y la cercanía al parque hicieron nuestra estancia memorable.

La habitación era amplia, pero la barrera para bebés no cumplía su función.

Las vistas desde la habitación eran impresionantes, se podía observar el parque y ver a los elefantes a lo lejos, lo que añadía un encanto especial a la estancia. El desayuno, abundante y variado, es perfecto para todas las edades y el atención del personal fue muy amable. Sin embargo, la calefacción tardó un poco en funcionar adecuadamente y se echaba de menos un parking privado para mayor comodidad.

Recomendado para parejas que quieren desconectar

La habitación fue una maravilla total, con un hidromasaje gigante. Las vistas a los elefantes y ciervos desde el balcón son algo alucinante.

No fue barato, pero aún así aceptable.